Publicado el 3 de diciembre de 2024

Movilidad sostenible en Europa: retos y estrategias

Una movilidad sin emisiones en 2035 en Europa es hoy una meta ambiciosa, aunque se esperan grandes avances en movilidad sostenible.
Movilidad sostenible Europa

La movilidad sostenible sigue siendo un reto en la transición ecológica de Europa. La nueva meta es lograr una movilidad sin emisiones en 2035. Pero la realidad a día de hoy aún no acompaña, aunque algunas previsiones son optimistas.

La Comisión Europea publicó una encuesta del Observatorio Europeo de Combustibles Alternativos (EAFO) que muestra que el 57% de los encuestados desearía comprar un coche eléctrico… Pero el coste es la principal barrera para la compra actualmente. 

La cuota de vehículos eléctricos en el mercado automovilístico europeo disminuyó ligeramente hasta el 13,3% en el primer semestre de 2024, frente al 13,8% del primer semestre de 2023 y el 15,4% de todo el 2023.

Según un análisis de la organización Transport & Environment (T&E), a partir de 2025, las ventas de coches eléctricos se recuperarán. Y es que, de cara a cumplir con el próximo objetivo europeo de emisiones de CO₂ de automóviles, los fabricantes priorizarán las ventas de vehículos eléctricos.

Así, la entidad espera que las ventas de estos vehículos aumenten hasta el 24% de la cuota de mercado en 2025. 

La razón principal será la nueva oferta de vehículos eléctricos para el mercado masivo mediante modelos de vehículos eléctricos asequibles (menos de 25.000 €). Estos modelos tienen una gran demanda y podrían derribar la principal barrera para el crecimiento definitivo del sector, que no es otra que la del precio.

Objetivos de movilidad sostenible

El objetivo de Europa es alcanzar una reducción de las emisiones de CO₂ del 55 % para los turismos nuevos y del 50 % para las furgonetas nuevas (con respecto a los niveles de 2021) entre 2030 y 2034. El fin último es, como se indicaba al principio del artículo, lograr la neutralidad total en 2035.

Esto se conseguiría mediante el aumento de las ventas de automóviles electrificados: eléctricos de batería (BEV), híbridos suaves y completos (HEV) y eléctricos enchufables (PHEV), pero también mediante diversas flexibilidades de cumplimiento de la normativa.

Esta normativa pondrá en marcha un mecanismo de incentivos para los vehículos de emisión cero y de baja emisión hasta finales de 2029. Consistirá en que, si un fabricante alcanza determinados niveles de venta de vehículos de emisión cero y de baja emisión, se le podrá recompensar con objetivos de emisiones de CO₂ menos estrictos. El nivel de referencia se fija en el 25% para los turismos y en el 17% para las furgonetas. 

El Reglamento incluye una cláusula de revisión en 2026 para evaluar el progreso. Eso sí, contempla una excepción para pequeños fabricantes (hasta final de 2035).

¿Y qué pasa con los fabricantes que no logren cumplir la normativa? 

En caso de que superen su objetivo de emisiones para un año, deberán pagar una prima de 95 euros por gramo de CO₂/km que supere el objetivo por cada vehículo registrado. 

Esto conllevaría que los vehículos de emisión cero terminarían siendo más económicos que los que funcionan con combustibles fósiles. 

Previsión de crecimiento de la movilidad sostenible

Se espera que los fabricantes de automóviles cumplan sus objetivos de CO₂ para 2025 basándose principalmente en la venta de vehículos eléctricos de batería. Se espera también que la proporción de híbridos suaves se duplique (del 19% al 37%). 

El crecimiento de las ventas de vehículos eléctricos representaría más de la mitad (60%) de la reducción de CO₂ necesaria para 2025.

Esto llegaría después de tres años de estancamiento, debido a que los fabricantes de automóviles se centran en las ganancias de los motores de combustión interna y los vehículos eléctricos de mayor precio.

El mercado de los vehículos eléctricos de batería tendría que alcanzar el 26% si no hay mejoras en los sistemas de propulsión con motor de combustión interna. Pero sería suficiente con el 20% si todos los fabricantes de automóviles se centran en mejorar la eficiencia de sus motores de combustión interna, vender más híbridos y reducir las ventas de los más contaminantes (principalmente, SUV), según las estimaciones de T&E.

La regulación de las emisiones de CO₂ de los automóviles seguirá impulsando a los fabricantes de automóviles hacia la movilidad eléctrica, pero debe ir acompañada de políticas nacionales para los vehículos eléctricos. Para garantizar que la industria automotriz europea siga siendo competitiva y lidere el sector de los vehículos eléctricos para el mercado masivo, los responsables políticos deben concebir e implementar planes estables y específicos de recarga de vehículos eléctricos y ayudas institucionales.

Ayudas a la movilidad sostenible en España: programa PATSYD

Cabe mencionar en este artículo el Programa de Apoyo al Transporte Sostenible y Digital (PATSYD). Es una iniciativa del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible. Ofrece ayudas a empresas privadas y entidades públicas empresariales que desarrollen una actividad económica en el sector del transporte. Se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia en el apartado de Movilidad sostenible, segura y conectada.

En consonancia con los objetivos del PERTE VEC y el programa MOVES III, pretende también impulsar la movilidad eléctrica en España, entre otros objetivos, que son:

  • Equilibrar el reparto del transporte de mercancía hacia modelos menos contaminantes.
  • Implantar los avances digitales y tecnológicos disponibles en el sector.
  • Mejorar la operativa y eficiencia del transporte de mercancías.
  • Fomentar la inversión del sector privado en estos proyectos.

El programa pretende contribuir a la digitalización e introducción de nuevas tecnologías en el sector, para aumentar la competitividad de las empresas. También busca la complementariedad de los diferentes transportes, que permita una mejor transmisión de la información entre ellos, principalmente en lo que a tráfico de mercancías se refiere.

A la primera convocatoria abierta en 2022, con 460 millones de euros, le ha seguido una segunda convocatoria en el cuarto trimestre de 2024, con 17,05 millones de euros, con posibilidad de una ampliación de 70 millones adicionales. Está segunda convocatoria está activa hasta el 2 de diciembre de 2024. Más información en este enlace del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible.

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