El año 2023 está siendo especialmente intenso para el gestor de las infraestructuras ferroviarias gracias, entre otros factores, a la reactivación del turismo. Con la liberalización, hace casi dos años, de la alta velocidad, los viajeros de este tipo de trenes en España han crecido nada menos que un 30% respecto al año anterior. Por otro lado, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) afronta un año de grandes inversiones como la futura estación pasante de Madrid-Atocha y el último tramo de la alta velocidad entre Murcia y Almería que suman más de 900 millones de euros de presupuesto; al desarrollo de nuevas líneas hay que sumar la renovación y mantenimiento de las ya existentes.
La última (hasta ahora) gran pieza del sistema de alta velocidad español acaba de ponerse con el visto bueno a la licitación por parte de Adif Alta Velocidad (AV) para sacar a concurso público la futura estación pasante de Madrid-Puerta de Atocha por 514,3 millones de euros inversión. Esta infraestructura, que se ejecutará bajo la actual estación y la calle de Méndez Álvaro, conectará con el acceso sur de alta velocidad que entró en servicio en julio del año pasado y que permite el paso de los trenes de alta velocidad entre Atocha y Chamartín. Las obras serán complejas desde el punto de vista técnico ya que durante su ejecución se mantendrá la circulación de trenes en superficie.
En este proceso, otro de los pasos importantes se dio con la apertura de la alta velocidad a la competencia privada algo que, según explican fuentes de Adif, constituye “un modelo único -el llamado caso español, reconocido por otros países de nuestro entorno- que, por primera vez en Europa, ha conseguido la competencia de tres operadores en un mismo corredor de alta velocidad”. Esos tres operadores son Ouigo e Iryo que se han unido a Renfe-Operadora en los últimos dos años.
Y es que esta medida está permitiendo aprovechar la capacidad de la red ferroviaria que despliega, opera y mantiene Adif y Adif AV -en el caso de la alta velocidad, la más amplia de Europa con casi 4.000 km y la segunda del mundo desde 2010- y, con ello, promover la circulación de más trenes y servicios.
En un primer momento la apertura del mercado se orientó a medidas específicas para facilitar la entrada de más operadores en los principales corredores de alta velocidad (Madrid-Barcelona, Madrid-Levante y Madrid-Andalucía). “Con esta fase, se dio un paso de gigantes, democratizando su uso, al que hoy ya tienen acceso casi 25 millones de ciudadanos de 14 provincias; un 57% del total de la población española”, explican desde Adif.
Tras la etapa de consolidación, el objetivo actual se dirige a configurar la liberalización como una oportunidad para que las empresas ferroviarias puedan usar la capacidad existente, más allá de los tres corredores iniciales. Fuentes del gestor de la infraestructura ferroviaria indican que se quiere ofrecer en régimen de competencia un mayor número de servicios de trenes, “porque la red ferroviaria de nuestro país tiene potencialidad para desarrollar un mayor nivel de tráfico”.
Además, hay que recordar que el proceso de liberalización arrancó con un contratiempo, la pandemia, y sigue haciendo frente a una coyuntura marcada por la inflación y la crisis energética, derivada de la guerra de Ucrania. En este escenario, a Adif le correspondió realizar un ejercicio de flexibilización para avanzar en la rentabilización de la red.
Entre las medidas relacionadas con este proceso están las negociaciones con las operadoras públicas y privadas para flexibilizar de forma temporal las condiciones recogidas en los acuerdos marco; la reducción o congelación de las tarifas de los cánones en los últimos tres años, incluido 2023; el mantenimiento de incentivos y bonificaciones, que representan hasta un 50%; y el trabajo con todas las operadoras en soluciones en materia energética con el fin de avanzar en fórmulas que les permitan una mayor independencia y capacidad de gestión. Así se ha hecho con el nuevo contrato de suministro de energía que está en vigor desde abril de 2023.
El impacto de la liberalización del transporte ferroviario en España: Adif en pleno auge
La liberalización de la alta velocidad combinada con la reactivación del turismo explica que se hayan recuperado los niveles anteriores a la crisis provocada por la Covid-19 y, de paso, certifica el éxito de esta apertura hasta el momento.
- La recuperación de los tráficos es claramente superior en aquellos corredores en los que se produce de manera efectiva la apertura del mercado.
- El tráfico ferroviario se elevó a 48,9 millones de trenes-km hasta marzo de 2023 y fue un 11,8% superior al registrado en primer trimestre de 2022. Atendiendo a la alta velocidad, se registra un incremento de 36,9%, que supone consolidar niveles superiores al tráfico prepandemia. Hay que destacar también que ya el primer trimestre de 2022 registró crecimientos muy relevantes frente al primer trimestre de 2021.
- En cuanto a los diferentes ejes ferroviarios, en las líneas de alta velocidad, el crecimiento más relevante corresponde a la LAV Madrid-Levante (76,6%), por la entrada de nuevos operadores y más km de alta velocidad en servicio. A este eje le siguen Madrid-Barcelona (44,8%), Madrid-Valladolid-León-Zamora-Galicia (20,2%) y Madrid-Andalucía (18%).
- Por su parte, el número de viajeros (subidos y bajados en las estaciones) creció un 11,6% en el primer trimestre del año con respecto a enero-marzo de 2022. En las estaciones titularidad de Adif AV, el crecimiento fue del 29,6%.
Otro ejemplo de la positiva evolución de los tráficos es la cuota del ferrocarril en el trayecto Madrid-Barcelona que ha pasado del 63% en marzo de 2019 a superar el 80% en la actualidad. Todo ello, además, repercute positivamente en Adif, ya que, como administrador de la infraestructura ferroviaria, cobra cánones a las operadoras por sus tráficos.
Un año de grandes inversiones gracias a la liberalización ferroviaria.
Al margen de la buena situación en lo que a la alta velocidad se refiere, 2023 está siendo un periodo de gran actividad en lo que se refiere a grandes inversiones de Adif, tanto en el desarrollo de nuevas líneas ferroviarias como en la renovación y mantenimiento de las ya existentes.
En 2023, el presupuesto agregado contempla una inversión de 6.160 millones, de los que casi 3.500 corresponden a Adif y cerca de 2.700 a Adif AV. A estas cifras se suman más de 1.200 millones en concepto de mantenimiento de la red de infraestructuras.
De hecho, los Presupuestos Generales del Estado (PGE) 2023 han vuelto a convertir a Adif y Adif AV en el mayor inversor público del país; un primer puesto más consolidado si cabe si a estos se suman los fondos MRR del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Además, y por segundo año consecutivo, las inversiones destinadas a redes ferroviarias convencionales y Cercanías -movilidad de proximidad- superan a las dedicadas a alta velocidad. El programa de inversiones de Adif se centra en tres grandes ejes:
- El desarrollo de nuevas líneas, que sirvan para completar la red transeuropea de transportes.
- La adaptación y mejora de la red convencional, con especial dedicación al transporte metropolitano de Cercanías.
- Y la mejora de las conexiones para el tráfico de mercancías, donde el ferrocarril está llamado a ser un actor fundamental en el desarrollo de una movilidad más sostenible.
Nuevas líneas tras la liberalización del transporte ferroviario y fondos Next Generation.
En el apartado de nuevas líneas y la creación del corredor transmediterráneo, Adif mantiene sus planes para consolidar una infraestructura que permita alcanzar a la mayor parte del territorio con una red de alta velocidad. En 2022 se han completado 269 nuevos km de alta velocidad en España.
Hace unos días el Consejo de Ministros ha dado el visto bueno a la integración ferroviaria en Lorca, una actuación presupuestada en 400 millones de euros con la que los 17 tramos que forman parte de la línea de alta velocidad entre Almería y Murcia estarán ya concluidos, en ejecución o en fase de contratación. Este proyecto, que forma parte del Corredor Mediterráneo, supondrá construir 3,2 km de línea de alta velocidad a su paso por Lorca -2,9 km de ellos mediante túnel- así como la estación Lorca-Sutullena.
Según el Ministerio de Transportes, Adif (y Adif AV) han superado el 100% de los hitos establecidos por el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) de los fondos europeos NextGenerationEU a 2022 con adjudicaciones por valor de 3.616,5 millones de euros (1.739,6 millones para Adif y 1.876,9 millones para Adif AV), a los que se suman 1.484,7 millones (un 106,1% más) en el componente Corredores Europeos.
Durante el primer trimestre del año, Adif ha adjudicado al consorcio compuesto por Lantania y ASCH la primera fase para conectar el aeropuerto de Barajas con la estación de Chamartín con trenes de alta velocidad, por un importe de 17,6 millones de euros.
Por otro lado, Adif Alta Velocidad ha adjudicado este año a Endesa Energía el contrato de suministro de energía eléctrica verde para el sistema ferroviario por 1.741 millones de euros. El contrato de energía de tracción asciende a 1.600,5 millones, mientras que el de usos distintos de tracción -estaciones, terminales de mercancías y otros recintos ferroviarios- se eleva a 140,7 millones.