La inversión implica empleo, atracción de talento, más servicios y con ello la repoblación de la España vaciada
En enero de 2022, un grupo de directivos y profesionales procedentes de diferentes sectores se unieron para crear BeHappy Investments, un fondo de inversión destinado a financiar proyectos que afrontan el desafío de la España vaciada, así como iniciativas sostenibles y beneficiosas para el sector primario. Se trata del primer fondo de este tipo financiado al 100% por capital español. “BeHappy Investments busca hacer crecer el valor de las inversiones apoyando con capital y conocimiento a las empresas elegidas que, a su vez, trabajarán para mejorar el mundo rural, el sector primario o el medio ambiente, por lo que se podría decir que tenemos primordialmente una función social, es un fondo de impacto”, afirma su presidente, Miguel Ángel Rodríguez Caveda.
¿Qué posibilidades de negocio e inversión existe en la llamada ‘España vaciada’?
Es cierto que la situación de mercado actual no es la ideal, pero nosotros creemos en el potencial de la España vaciada y de los proyectos que surgen en estas áreas. Incluso si España entrase en recesión, las zonas rurales tendrán aún más interés precisamente por sus ventajas económicas.
En este sentido, las posibilidades son infinitas. En nuestro caso, a pesar de tener una visión muy definida, el espectro es muy amplio. Todos aquellos proyectos que estén relacionados con las áreas rurales, la España vaciada, la sostenibilidad y el sector primario pueden ser objeto de nuestra financiación y consideramos que son interesantes para todo tipo de inversores, tanto objetivamente por sus cifras de negocio como por el impacto social que están generando.
¿Cuáles son, en este sentido, los sectores o nichos con mayor potencial?
Evidentemente, todas aquellas empresas que incluyan la sostenibilidad en su ADN son de gran interés ya que hoy en día no se concibe invertir en una empresa que no persiga el cumplimiento de los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) e incluya criterios ESG (Environmental Social Governance) en su estructura.
En nuestro caso, encontramos potencial en diferentes sectores o nichos. Por el momento hemos analizado proyectos relacionados con la agricultura, la actividad cinegética, la logística, la reutilización de residuos orgánicos y las energías renovables, entre otros. Uno de los que hemos estudiado a fondo, por ejemplo, convertía residuos orgánicos en materiales sustitutivos del plástico; otro transformaba basura del mar en elementos para la construcción; y otro generaba recursos alimenticios de forma eco-sostenible. También hemos visto uno que ayudaba al equilibrio del ecosistema animal.
¿De qué manera se pueden activar esas potencialidades?
Se pueden impulsar fomentando el consumo responsable a nivel local, dando voz a estas nuevas empresas innovadoras y, por supuesto, invirtiendo en estos proyectos que van a traer consigo un impacto social positivo.
¿Qué haría falta para convertir esos territorios en rentables y, por lo tanto, recuperar población en ellos, más inversión pública, fomento de teletrabajo mediante ayudas, cambio en la mentalidad de urbanitas y rurales?
Hay muchas formas de impulsar estos territorios, pero desde BeHappy Investments creemos que la inversión debe ser el eje principal. Nos referimos no solo a inversión privada como la nuestra, sino también institucional como la que se propone en la nueva Ley de Startups o en los Presupuestos Generales del Estado.
La inversión implica creación de empleo, atracción y retención de talento, crecimiento económico, mayor oferta de servicios y, por consiguiente, también favorece la repoblación de la España vaciada. Por supuesto, el cambio de mentalidad que se produjo en la pandemia y el auge del teletrabajo también son factores decisivos.
Uno de los grandes obstáculos en la repoblación del medio rural reside en la falta de servicios o de oferta de ocio, ¿cómo podría empezar a revertirse esta situación?
La principal razón de la despoblación es la fuga de talento joven debido a la falta de oportunidades laborales. Por eso, si conseguimos generar empleo y promover la innovación y la disrupción tecnológica en estas zonas, atraeremos población y nuevos servicios, entre ellos una mayor oferta de actividades de ocio.
¿Como podría fomentarse la inversión de empresas o el asentamiento de teletrabajadores en estos territorios?
Vamos hacia una descentralización. Actualmente tu empresa ya no tiene por qué estar ubicada en Madrid o Barcelona donde los costes son tan elevados. Cada vez se crean más hubs en otras zonas como puede ser por ejemplo Málaga y en un futuro sucederá lo mismo en las zonas rurales.
En cuanto a la inversión, al igual que se conceden beneficios de distintos tipos a empresas que cumplen una función social o que se ubican en la España vaciada, también se deberían contemplar ventajas para aquellos que invertimos en estas compañías. Esto ayudaría a aumentar su atractivo de cara a potenciales inversores a nivel nacional e internacional.
¿Qué riesgos o inconvenientes hay, en este sentido, y cómo pueden reducirse?
El riesgo realmente no existe. Es decir, lo peor que puede pasar es que esa descentralización se reduzca y que nos quedemos como estamos. Pero todo apunta a que no será el caso. Y para evitar que ocurra, hay que ponerse manos a la obra con proyectos e inversiones que ayuden a seguir en esta senda.
El Gobierno destinará en los PGE de 2023 más de 4.400 millones para afrontar lo que llaman el reto demográfico ¿Les parece suficiente? ¿En qué deberían focalizarse estos fondos?
Todo dependerá de cómo se distribuyan. Como punto de partida, parece interesante, pero si al final los fondos no llegan donde tienen que llegar, no servirá de nada. Tienen que enfocarse sobre todo en crear la infraestructura necesaria para que estas zonas puedan seguir creciendo y sean cada vez más atractivas para los inversores y los jóvenes talentos.
¿Cuál es la propuesta de BeHappy Investments para acelerar proyectos en este ámbito?
Nuestro objetivo es apoyar la modernización del medio rural a través de la inversión en iniciativas y startups que luchan contra la despoblación de las provincias rurales del interior de España a través de la creación de empleo y riqueza. De esta forma, el vehículo permitirá que estos proyectos consigan respaldo económico sin necesidad de acudir a entidades bancarias.
